En nuestro país, con el nacimiento y
puesta en marcha de la democracia, en 1958, aunque hubo algunos avances
importantes en educación, ésta no se atiende como hecho prioritario, por lo
que la exclusión educativa reinaba en la vida de muchos venezolanos y el
deterioro en este sector vital para cualquier sociedad se hizo marcado
con el pasar de los años.
No obstante, en la década de los años
70 se empiezan a atender algunos aspectos sensibles de la Educación venezolana,
muchos de ellos de manera experimental; para aquel momento el maestro era
considerado un catedrático que dominaba toda la escena en el aula,
mientras el educando era calificado como simple receptor memorístico de
la enseñanza del maestro.
Visualizar y analizar la causa de orden
teórico que determina la tan nombrada crisis de la educación actual significa
reflexionar la educación como una realidad compleja producto de un proceso que
ha sido cambiante, dramático y diverso.
1.
La “Crisis Educativa” es un problema
estructural condicionado por postura científica y filosófica enmarcado en un
sistema capitalista que responde a la clase dominante de cada momento
histórico correspondiente a la concepción del mundo y del hombre en que tales
intereses se expresan. Por consiguiente, imitar modelos educativos
desentendiéndose de la realidad sociocultural, es una negación a la existencia,
es perder la autonomía como sociedad.
2.
Por un lado se hallan las necesidades
reales del país y por el otro los modelos educativos teóricos copiados.”
Y estos modelos al convertirse praxis-teóricas y operativa en nuestro espacios
educativos, tienden a reproducir la ineficacia de la educación, pues jamás
aciertan a responder a nuestras necesidades reales. Por esta y otras razones,
la educación debe ser más humana y menos técnica. El educador es un catalizador
de su entorno, desde su espacio geográfico hasta las vivencias sociales y
psicológicas de los individuos a formar. Dicho en otras palabras, la educación
nos debe hacer más humanos, ya que el educador es según Morin (2002) “El
conocimiento pertinente es el capaz de situar toda información en su contexto
y, si es posible, en el conjunto que ésta se inscribe.” Ahora bien todos los
problemas particulares no pueden plantearse y pensarse correctamente si no es
en su contexto.
3.
¿La universidad está formando a los
docentes para darle respuestas a la realidad del país? El educador debe
despertar la conciencia y hacer del educando un visionario con propósitos bien
definidos, capaz de asumir con responsabilidad y compromiso los grandes retos
de nuestros tiempos. el reto es educar individuos que piensen, que
reflexionen, que reconozcan su medio e interactúen con él con solidaridad.
4.
El deterioro en la infraestructura
de muchos de los centros educativos venezolanos, así como insuficiencia de
nuevas edificaciones que contemplen los requerimientos para brindar un espacio
acorde a la realidad estudiantil que vive Venezuela, que se enmarca
en políticas gubernamentales incluyentes.
5.
El deterioro de los valores, la
desmotivación y la disminución del interés por parte del alumnado y de los
representantes, en involucrarse de forma activa con el docente en el proceso de
aprendizaje; con el propósito de desarrollar un equipo de trabajo que logre la
consecución de los objetivos deseados.
6.
La necesidad de la participación de las
comunidades en el área educativa de su entorno.
Por otra
parte, la acción docente en el aula demanda una mejora, pero para que esa
mejora pueda traducirse en un hecho, es necesario desarrollar una nueva visión
de los procesos de formación que exprese su complejidad y naturaleza, esa nueva
visión deberá promover la independencia de pensamiento y la creatividad,
respetuosa de la diversidad cultural, sobre la base de la cooperación
y la promoción de esfuerzos colectivos, generadores de la creación de
escuelas de conocimientos, que sean líderes en áreas específicas y en estrecha
relación con el desarrollo social.